En la rectoría del doctor Edylberto Cabral Ramírez y la presidencia de Fausto Herrera Catalino, en ASODEMU, la cual había sometido un pliego reivindicativo que incluía un reajuste salarial y la reclasificación de puestos para aplicarse a partir de enero de 1998.
Dicho compromiso fue incumplido por las autoridades universitarias. En consecuencia, la Asamblea General de ASODEMU reunida para tratar la grave situación aprobó a unanimidad la huelga indefinida en la sede y los centros regionales de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Al inicio del conflicto, por resolución del Consejo Universitario canceló a 12 directivos de 13, por cuanto obviaron el nombre de Jorge Rodríguez, quién se mantuvo firme y leal a la directrices de la Asociación.
Esta resolución arbitraria exacerbó los ánimos al extremo del peligro de agresiones, en ambas direcciones; personalidades como el padre Rogelio Cruz, esa noche medió y amaneció en el Alma Mater, como “escudo” con los empleados para evitar una tragedia.
Esa noche, también, la Asamblea en huelga acordó el cierre completo de la sede y asumió el control de las instalaciones físicas. La Directiva o el Pleno tenían mandato para resolver cualquier asunto de urgencia.
El conflicto se prolongó 40 días. Cada día se realizaba una Asamblea evaluativa donde todos los empleados firmaban su asistencia. También se celebraron algunos eventos especiales, como la presentación de la artista Sonia Silvestre en el Aula Magna, en ocasión del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer y una charla que dictó Mirtha Bergés, acerca del buen desempeño laboral, en el mismo lugar. La huelga en desarrollo mientras crecía la preocupación generalizada: los actores universitarios, el gobierno y la sociedad dominicana.
La alianza estratégica el “Acuerdos arribados por el Comité Ejecutivo Central de la FED y la Directiva de la ASODEMU, el 25 de febrero de 1998; “Acuerdo de compromiso entre FAPROUASD y ASODEMU” firmado el 5 de marzo de 1998.
Transcurridas dos semanas, las autoridades universitarias encabezada por el rector llegaron al Alma Mater y acompañados por miembros de la seguridad; en ese momento estaba a cargo de la huelga el secretario general, compañero Hugo Darío Aquino, quién se comportó con valentía e infundió valor a los empleados presentes quienes resistieron la orden de las autoridades de permitirles ingresar al área financiera bajo el control de ASODEMU.
Las autoridades tuvieron que retirarse sin lograr su objetivo. En tanto el presidente de ASODEMU estaba en una entrevista en televisión con la periodista Nuria Piera, donde al final hizo un sondeo que por mayoría de opinión ganó ASODEMU. En el Listín Diario también ganó otra encuesta.
En el programa Revista 110, del Dr. Julio Hazim, se desarrolló una presentación del rector y los vicerrectores, en respuesta ASODEMU con su Directiva y algunos delegados al Pleno, en entrevista aclaró inexactitudes vertidas por las autoridades universitarias en anterior presentación.
Freddy Veras Goico, invitó al vocero de ASODEMU a su popular programa, en circunstancia que se urdían planes oficialistas para en medio de una trifulca provocada por agentes y estudiantes infiltrados agredir a los directivos de ASODEMU y desalojar a los empleados. Ese objetivo también falló por el liderazgo monolítico y la correcta estrategia de las demandas; además las alianzas con el movimiento sindical, SITRACODE, la Internacional de Servicios Públicos (ISP), la FISE, FESITRAUCAMMC, el Cardenal de la iglesia católica y la UNESCO.
En acciones solidarias se destacaron el profesor Facundo Acosta, maestro Celso Joaquín Benavides García, Lic. Micaya Almanzar, Pablo Herrera, Apolinar Martínez, licenciado Francisco Herrera Catalino, Juan Hubieres, Eulogia Familia, Ignacio Soto, Ing. Miguel Rosado Montes de Oca, entre otras personalidades.
El doctor José Francisco Peña Gómez, en convalecencia por su cáncer, cada día hizo contacto vía telefónica con el presidente de ASODEMU para saber cómo iba la situación. En procura de una solución delegó al secretario general del Partido Revolucionario Dominicano, licenciado Hatuey D’Camps Jiménez.
Este emprendió la tarea en contacto con el Dr. Angel Veras, secretario general de la UASD. Hicieron una primera propuesta rechazada por los trabajadores, debido a que proponía ampliar el horario de trabajo y suprimir las compensaciones por horas extras.
La Comisión Central Electoral de la UASD, Dr. José Silié Gatón, presidente y el Lic. Servulo Natera, miembro-secretario; mediaron al presentar un texto escrito que apertura la salida más conveniente para la academia patrimonio del pueblo dominicano.
El día 39 de la huelga, tras reunirse el Consejo Universitario, se firmó un acuerdo pactado entre la rectoría y el presidente de ASODEMU, con mandato de la Asamblea, por virtud del cual, simultáneamente, se levanta la huelga y se dispone un 50% de aumento salarial y la reclasificación de puestos a todos los servidores universitarios, activos, jubilados y pensionados. “La UASD cede; subirá sueldos”, El Nacional, primera página, domingo 22 de Marzo de 1998.
– Fausto Herrera Catalino
Deja una respuesta